Un día moriré y quizá escribiendo estas líneas ya lo he hecho. Y no sé cómo descubrir si esto es así. Me escucho respirar y contemplo todas las partes de mi cuerpo más allá de mis pestañas podadas; pero ni tan siquiera esto confirma nada. Y sé que moriré si no lo he hecho. Moriré de pena viendo la jaula del pájaro vacía, la cama deshecha, el tenedor sucio y la tierra mojada. Cerraré los ojos con fuerza para iluminarlo todo de rojo, o de blanco, o qué sé yo. Y antes de morir, si no lo he hecho, reventaré mi vida y todo lo que me rodea. El niño sin sus libros para el colegio, la condenada enfermedad de Ahmed, los cajeros con cama, las mierdas de perro, el "hijo de puta" en los dientes de esa niña rubia con trenzas, la abandonada silla de ruedas tropezando por la acera empujada por el viento, tú. Me cagaré en las garras del león del palacio de congresos y también lo haré sobre mí mismo. Y me limpiaré con un mapa político de Europa a escala 1:10000000 o 1:500000 o puede que ya esté muerto.
No estoy a favor de ir a médicos
Hace 3 días
Sensacional. Lo que más me ha gustado de todo lo que te he leído, y mira que me gusta. Es muy bueno. "Moriré de pena viendo la jaula del pájaro vacía, la cama deshecha, el tenedor sucio y la tierra mojada. " Enhorabuena!
ResponderEliminarCréeme si te digo que esperaba con verdadera ansiedad tu opinión, en este relato era mucho más importante, así que me alegro un montón de que te gustase... Abrazos
ResponderEliminarMe ha gustado mucho la entrada :)
ResponderEliminarTe sigo.
Si quieres pásate por mi blog, se llama sumergida entre paginas.
¡Saludos!
Me alegro Laura, por supuesto que me pasaré y ya te comentaré, un abrazo
Eliminar